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La prueba más espectacular de hoy la protagonizó, una vez más, Sebastián Rodríguez, quien, en los 200 metros libre de la clase S5, se alzó con su segundo oro de Atenas y con su segundo récord del mundo.

El nadador parapléjico gallego invirtió 2’41”87 y rebajó drásticamente la anterior plusmarca mundial, en poder del británico Anthony Stephens con 2’47”82, quien, precisamente, tuvo que conformarse con la medalla de plata con un tiempo de 2’45”84. En esta misma prueba, el mallorquín Xavier Torres ocupó la sexta posición.

El segundo oro de la jornada fue para la paralítica cerebral Sara Carracelas (clase S2), que dominó la carrera desde el principio hasta el final y con mucha autoridad. No en vano, realizó 2’49”38 en los 100 metros libre, por los 3’12”70 de la segunda clasificada, la británica Danielle Watts.

Por su parte, el discapacitado físico David Levecq (S10) se proclamó subcampeón paralímpico de los 100 metros libre, con un tiempo de 56”32, a 2”59 del vencedor, el canadiense Benoit Huot.

El paralítico cerebral Richard Oribe (S4) concluyó en la segunda posición de los 200 metros libre, con 3’02”25. Los 2’55”75 del vencedor, el brasileño Clodoaldo Silva, quedaron inalcanzables hasta el punto de que supusieron un nuevo récord del mundo y también paralímpico.

Por otro lado, tres discapacitados visuales coparon los tres bronces de la natación. Israel Oliver (S12) remontó en la segunda parte de los 100 metros mariposa para subir al tercer peldaño del podio, con 1’03”15, sólo ocho centésimas menos que su compañero Enrique Floriano.

El ciego total Enhamed Mohamed (S11) logró la primera medalla paralímpica de su carrera deportiva al concluir tercero en los 100 metros mariposa, después de acabar la prueba con 1’11”59.

Ana García—Arcicollar (S12), que se proclamó campeona paralímpica de los 400 metros libre el pasado domingo, cosechó su segundo metal en Atenas, el bronce de los 100 metros mariposa.