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Casinos, de 40 años y con ceguera total, había subido al podio en esta especialidad en las 13 competiciones internacionales anteriores en las que había participado, con un balance de 12 oros y 1 plata, y se adjudicó ayer la medalla de oro paralímpica en el lanzamiento de disco.

Así, fue campeón en los Juegos Paralímpicos de Sidney 2000, Atenas 2004 y Pekín 2008; campeón del mundo en Lille (Francia) en 2002, en Assen (Holanda) en 2006 y en Christchurch (Nueva Zelanda) en 2011; campeón de Europa en Lisboa (Portugal) en 1999, en Bialystok (Polonia) en 2001, en Assen (Holanda) en 2003, en Espoo (Finlandia) en 2005 y en Rodas (Grecia) en 2009, y en los Juegos Mundiales para Ciegos y Deficientes Visuales en Sao Paulo (Brasil) en 2007.

Además, obtuvo la medalla de plata en el lanzamiento de peso del Campeonato del Mundo de Atletismo en Pista Cubierta disputado en Bollnäs (Suecia) en 2006.

Ante el primer día soleado de los Juegos, con 24 grados de temperatura, Casinos comenzó en la cuarta posición con un lanzamiento de 12,57 metros y concluyó el corte de los ocho finalistas en la segunda posición, con 13,01 metros en el tercer intento. El atleta valenciano realizó después dos nulos y finalizó con otro lanzamiento de 13,01 metros en la última tentativa.

Al concluir su concurso, Casinos se cruzó en la zona mixta del Estadio Olímpico con el atleta español Ignacio Ávila, que se preparaba para la semifinal de los 800 metros. Ambos se fundieron en un abrazo y estuvieron departiendo durante un par de minutos.

Posteriormente, declaró a los periodistas que se encontraba "muy contento" porque el nivel de sus rivales fue "muy alto". "El quinto puesto sabe a muy poco, pero la temporada ha sido muy irregular porque he tenido lesiones y he cambiado mi técnica de lanzamiento", explicó.

El deportista valenciano felicitó a sus adversarios y les dijo: "Mucho cuidado, que David Casinos irá a Río (a los Juegos Paralímpicos de 2016)". Reconoció que tuvo "un mal día" y apuntó que la temperatura reinante en el Estadio Olímpico fue "terrible".

Asimismo, él mismo y su guía, Celia Mestre, señalaron que habían dormido cuatro horas después de obtener ayer la medalla de oro en el lanzamiento de disco. "Nos acostamos a la una de la madrugada y a las cinco estábamos en pie porque había que activarse", indicó Mestre.