Sergio Ibáñez, judoka zaragozano de 22 años y con discapacidad visual grave, logró este viernes el mayor éxito de su carrera deportiva al colgarse la medalla de plata en los Juegos Paralímpicos de Tokio 2020. Además, se trata del 20º metal del judo paralímpico español desde Barcelona'92.
Ibáñez, que compitió en la categoría de menos de 66 kilos y es el séptimo del ranking mundial, perdió el combate final contra el uzbeko Uchkun Kuranbaev (cuarto en el ranking) en el Nippon Budokan de Tokio, templo de las artes marciales en la capital japonesa.
Pese a no haber aficionados en las gradas, Ibáñez pudo sentir el aliento y los ánimos de todo el equipo paralímpico español de judo, que estuvo apoyando al aragonés desde su primer combate, el cual concluyó con victoria por 'ippon' a los 2'10" ante el costarricense Luis Jabdiel Pérez.
Ya en cuartos de final, Ibáñez se enfrentó al azerbaiyano Namig Abasli, a priori uno de los favoritos a alzarse con medalla al ser el segundo del ranking mundial. El judoka zaragozano derrochó una gran forma física y se mantuvo muy firme hasta llegar al final del tiempo reglamentario con dos amonestaciones para su rival. En el 'punto de oro' (tres minutos extra), Ibáñez venció por 'waza-ari', lo que valió su pase a semifinales.
Sin mucho tiempo de recuperación, llegó la penúltima ronda ante el georgiano Giorgi Gamjashvili (tercero en el ranking mundial) y al que venció por 'ippon' a los 43 segundos de comenzar el combate. La victoria fue muy festejada por sus compañeros del equipo y el cuerpo técnico español.
Por la tarde se disputaron los combates decisivos de medallas. La gran final enfrentó a Ibáñez contra Kuranbaev y ganó el uzbeko por por 'waza-ari' a los 27 segundos de iniciarse el 'punto de oro', ante las protestas de su entrenador y la desaprobación del judoka aragonés.
“Haber perdido una final nunca es algo agradable, pero hay que levantar la cabeza y disfrutar de este momento, que nunca sabes si se va a repetir o no. He hecho lo que tenía que hacer, lo llevo preparando meses y he hecho bien mi trabajo”, comentó Ibáñez tras recibir la medalla.
RIVALES SIN DISCAPACIDAD
A sus 22 años, Sergio Ibáñez confirmó en Tokio 2020 su progresión encima del tatami después de que en 2018 lograra que, por primera vez en la historia del judo español, un deportista con discapacidad visual se colgara una medalla en el Campeonato de España absoluto frente a rivales sin discapacidad, concretamente la de plata en la categoría de menos de 60 kilos.
En el Campeonato de España de 2020, organizado en Madrid por la Real Federación Española de Judo, Ibáñez volvió a brillar con una medalla de bronce. Además, el aragonés cuenta en su palmarés con una medalla de plata conseguida en un Mundial de Judo para Ciegos y otra plata y un bronce en campeonatos de Europa.
El judo es uno de los deportes con menos modificaciones para personas ciegas y sólo es preciso que los combates se inicien con los dos deportistas agarrados. Si se sueltan, el árbitro para que vuelvan a cogerse. Existen otras adaptaciones en la forma en que los árbitros transmiten las señales a los deportistas, ya que no lo pueden hacer por gestos.