ESPAÑA JUGARÁ MAÑANA POR EL 5º PUESTO TRAS GANAR A POLONIA Y MANTIENE ASÍ LAS ESPERANZAS DE CLASIFICARSE PARA RÍO 2016

La selección española masculina dio este viernes un paso más hacia la quinta posición del Campeonato de Europa de Baloncesto en Silla de Ruedas, que se juega en Worcester (Gran Bretaña) y, por tanto, de clasificarse para los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro 2016 después de imponerse a Polonia por 56-47 gracias a un espléndido último cuarto y tras un disputadísimo partido en el que supo sufrir para resolver en los momentos decisivos.

El encuentro estuvo presidido por una igualdad extrema en el que España remontó una desventaja de nueve puntos al inicio del segundo cuarto y endosó un parcial de 15-0 en el último periodo que dejó a los polacos sin anotar durante ocho minutos

Los ánimos de las chicas de la selección femenina desde un lateral del pabellón también llevaron en volandas a los pupilos de José Artacho hacia la ansiada quinta plaza. Los Trainers Paralímpicos (destacaddos ex deportistas españoles con discapacidad) también apoyaron al equipo desde las redes sociales con el hahstag #NoHayQuintoMalo.

En un partido de estrategia defensiva, uno de los puntos fuertes de España se centró en dejar fuera de combate al jugador más valioso del campeonato, Mateusz Filipski, que sólo pudo lograr 9 puntos cuando hasta hoy promediaba 22’67 por partido. Y el equipo polaco, el más anotador en la fase previa con 81’6 puntos de promedio, se ‘secó’ al quedarse en 47 tantos, prueba de la buena defensa presionante al hombre en toda la cancha practicada por los de Artacho.

La selección española afrontaba el encuentro después de quedarse fuera de la lucha por las medallas al perder contra Turquía (63-54) después de ir a remolque y de acercarse a dos puntos a tres minutos y medio del final.

Y Polonia sucumbió ayer contra Holanda en lo que a priori fue el resultado sorpresa de los cuartos de final (63-56), pero los neerlandeses, la segunda selección más joven y quizá la más rápida del Europeo, demostraron que pretenden reverdecer viejos laureles de antaño dando una lección de baloncesto total con problemas persistentes de los polacos en la salida de presión y un pívot alto y dominante como Mattjis Bellers.

Antes del partido de hoy, España había encadenado tres derrotas consecutivas contra Gran Bretaña, Alemania y Turquía, y estaba obligada a volver a la senda triunfal. En la memoria reciente estaba el triunfo el pasado lunes de los españoles contra los polacos en la prórroga (82-81).

LAS ESTRELLAS DE POLONIA, APAGADAS

Con la consigna de incomodar a Filipski, Luszynski, Balcerowski y compañía en sus habituales transiciones rápidas del balón a la otra cancha para iniciar jugada, Artacho apostó por un quinteto de titanes defensivos que, al tiempo, pudieran anotar también desde el exterior previendo defensas polacas muy cerradas en la zona. El quinteto inicial lo formaron Daniel Stix, Pablo Zarzuela, Alejandro Zarzuela, Jordi Ruiz y Asier García.

Ruiz, el héroe que forzó la prórroga el pasado lunes, abrió el marcador, pero Polonia comenzó más entonada aprovechando que los fallos de la maquinaria defensiva española, con una ventaja de ocho puntos que fue reducida ligeramente al concluir el primer cuarto (8-14).

Un dos más uno de Bandura dio al equipo polaco la máxima ventaja en el partido iniciado el segundo cuarto (8-17), aunque un parcial de 8-0 devolvió la igualdad a un partido que, aunque fuera de las medallas del Europeo, era una auténtica final para las dos selecciones. En esto, se llegó al descanso con una mínima diferencia a favor de España (26-24).

Mediado el tercer cuarto, y tras la entrada de David Mouriz y Jesús Romero por Stix y García, Polonia parecía escaparse (30-37), pero otro parcial de 8-0 volvió a dejar el partido prácticamente en los tacos de salida, con 41-39 al concluir el tercer cuarto.

Con todo por decidir, tres canastas consecutivas de los polacos dieron nuevamente la vuelta al marcador, pero a ocho minutos y medio del final llegó lo mejor: España endosó un 15-0 que fraguó la victoria de los de Artacho, limada con dos últimos tiros libres de Balcerowski.

Filipski no estuvo cómodo para desplegar su talento, Luszynski estuvo más de 13 minutos en el banquillo por su condición de seleccionador-jugador, Balcerowski hizo el daño justo con sus tiros exteriores y Bandura rindió también por debajo de su nivel.

Al igual que en el partido de la fase previa contra Polonia, Alejandro Zarzuela recibió la placa que le condecora como MVP del encuentro. El pívot jerezano logró 24 puntos de valoración, con 21 puntos y 7 rebotes. También destacaron Asier García (que en el primer cuarto tuvo que irse momentáneamente al banquillo por problemas técnicos en su silla), con 14 puntos, 7 rebotes y 11 asistencias, y Pablo Zarzuela, autor de 12 puntos y 7 rebotes.