El pasado 16 de noviembre, Madrid 2020 presentó la primera parte de ‘20 /20, unidos por un sueño’, un proyecto que ensalza los valores olímpicos de las futuras estrellas del deporte español. En este acto, 20 jóvenes talentos de múltiples disciplinas se convirtieron en los primeros abanderados de la Candidatura de Madrid para albergar los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de 2020. Entre ellos se encontraban la nadadora Sarai Gascón y el tenista en silla de ruedas Daniel Caverzaschi.
Los abanderados son diez chicos y diez chicas procedentes de diversos lugares de España, de características muy diferentes, que representan 20 historias humanas que convergen en un sueño común: llegar a los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Madrid 2020 en el mejor momento de sus carreras deportivas. Entre ellos hay dos deportistas paralímpicos: la nadadora Sarai Gascón, de 20 años, que ya cuenta en su palmarés con tres medallas paralímpicas, y el jugador de tenis en silla de ruedas Daniel Caverzaschi, que disputó en Londres sus primeros Juegos.
Cada uno de los 20 deportistas estuvo apadrinado por un periodista que redactó un perfil sobre su trayectoria, y proyección y participó en los videos biográficos que se pueden encontrar en la página web de Madrid 2020.
Al acto asistieron también la alcaldesa de Madrid, Ana Botella; el presidente del Comité Olímpico Español y de la Sociedad Madrid 2020, Alejandro Blanco, y el presidente del Comité Paralímpico Español, Miguel Carballeda. La presentación corrió a cargo de dos medallistas olímpicos, la judoca Isabel Fernández y el tirador de esgrima José Luis Abajo ‘Pirri’.
“Sois nuestros primeros 20 abanderados –pues este programa va a tener continuidad–; pertenecéis a federaciones deportivas diferentes y provenís también de diferentes rincones de nuestra geografía. Porque la candidatura para los Juegos Olímpicos y Paralímpicos de Madrid 2020 es un proyecto de toda España”, señaló Botella.
“Forman un mosaico humano que expresa la riqueza ciudadana de un país para el que el deporte supone una pasión, una recompensa y un consuelo, además de un motivo de prestigio internacional”, destacó Alejandro Blanco. “Son jóvenes –añadió– que encarnan valores intemporales como el espíritu de sacrificio, el afán de superación y el juego limpio. El deporte no es sólo un fin en sus vidas, sino un medio para ser mejores y, en cierto modo, hacernos mejores a todos con su ejemplo”.